Los alcanos con
menos átomos de carbono son gases. El pentano ya es líquido a temperatura
ambiente. A medida que el peso molecular aumenta, su punto de fusión
aumenta y también su punto de ebullición y su densidad (en el caso de
líquidos).
Una ramificación
hace descender el punto de ebullición en unos 8‑10 ºC, (los isómeros
tienen puntos de ebullición diferentes).
Los ciclo
alcanos (CnH2n) tienen propiedades similares a los
hidrocarburos del mismo número de átomos de carbono, aunque su punto de
ebullición es algo superior.
Los
hidrocarburos saturados son especialmente inertes en la mayoría de las
reacciones químicas. No obstante reaccionan con halógenos a elevadas
temperaturas y con ayuda de catalizadores dando lugar a derivados
halogenados. La reacción no conduce a un único derivado halogenado sino a
varios:
CH4 + Cl2
CH3Cl + CH2Cl2 + CHCl3 + CCl4
En condiciones
severas de presión y temperatura, los hidrocarburos de alto peso molecular
se rompen en fragmentos más pequeños. Este proceso se llama "cracking"
y es de mucho interés para la obtención de la gasolina (octano) a partir
de hidrocarburos de mayor número de átomos de carbono.
Pero la reacción
por excelencia de los hidrocarburos es la combustión; se combinan con
oxígeno (arden) para dar dióxido de carbono y agua liberando gran cantidad
de energía:
CnH2n+2 +
(3n+1)/2 O2
n CO2 + (n+1) H2O
Esta reacción
constituye la base de todas las aplicaciones de los hidrocarburos como
combustibles y sobre ella se basa nuestra economía, salud y bienestar. El
calor liberado va aumentando de forma regular al aumentar el número de
carbonos del hidrocarburo (unos 660,44 KJ/mol por cada grupo -CH2-.
El metano tiene una entalpía de combustión de –886,16 KJ/mol; el etano de
–1.569,14 KJ/mol: el propano – 2.219,58 y así sucesivamente, el decano
–6.771,60 KJ/mol.
La fuente
principal de los hidrocarburos es el petróleo que se encuentra a
profundidades variables tanto en sedimentos terrestres como submarinos,
sometido a grandes presiones. El petróleo se puede definir como materia
orgánica formada fundamentalmente por hidrocarburos líquidos, con otros
gaseosos y sólidos en disolución, acompañada muchas veces de agua salada.
Se trata de hidrocarburos, desde el metano hasta especies complejas con
más de 40 átomos de carbono que no pueden destilarse sin una
descomposición previa.
La complejidad y
número enorme de especies presentes en el petróleo obliga a considerarlo
como un conjunto de fracciones, entendiendo por tales las partes en que
prácticamente puede dividirse el petróleo por razón de la distinta
volatilidad de los diferentes hidrocarburos que lo componen. Además de
hidrocarburos se hallan también presentes compuestos que contienen
Oxígeno, Nitrógeno y Azufre.
El
producto que mana de los pozos es un líquido más o menos denso, viscoso y
negruzco al que acompañan cantidades importantes de gas desorbido al
disminuir la presión del yacimiento. En el propio campo petrolífero se
priva al "crudo" del agua y los sólidos interpuestos, pero todavía es
necesario, frecuentemente, eliminar los gases disueltos, pues hacen
peligroso y difícil su transporte. Esta operación se llama estabilización,
y se aprovecha para separar los gases de mayor volatilidad.
El crudo
estabilizado se trata en las refinerías de acuerdo con el destino que se
fije para los productos obtenidos. La cantidad de cada uno de ellos que se
obtenga dependerá, en gran medida, de la constitución molecular , o sea,
de la "base" del crudo.
El trabajo en la
refinería tiene un cuádruple objetivo:
-
Separar el crudo en varias fracciones acomodadas
a las necesidades del mercado (gasolinas, gasóleo, queroseno,
parafinas, etc.) a lo que se llama fraccionamiento.
-
Modificar (generalmente aumentar) las
proporciones de las fracciones volátiles, como la gasolina, mediante
la operación llamada craqueo, a expensas
de las fracciones más pesadas.
-
Variar la naturaleza de los hidrocarburos
componentes de las fracciones volátiles (gasolinas) para elevar su
calidad de carburante (su octanaje), mediante el craqueo catalítico (reforming).
El índice de
octano u octanaje es una escala que se utiliza para comparar el poder
antidetonante de las gasolinas. Los niveles de referencia son el
heptano (nivel 0) y el isooctano (nivel 100). Según esto, una gasolina
de 95 octanos tiene el mismo poder antidetonante que una mezcla del 95
% de isooctano y el 5% de heptano. Hay gasolinas que superan el nivel
100, es decir son más antidetonantes que el isooctano puro.
Las gasolinas de cadena lineal son más
detonantes que las que tienen compuestos ramificados o cíclicos. La
adición de algunos compuestos químicos mejora el poder antidetonante
de las gasolinas. El más utilizado es el tetraetil plomo. Sin embargo,
últimamente se ha determinado que se dejen de utilizar ya que la
contaminación consiguiente por plomo es muy peligrosa.
-
Eliminar de las fracciones los componentes
indeseables, proceso al que se llama genéricamente refino
y especialmente desulfuración, desparafinado,
desalfaltado, etc.
Existen
otras dos fuentes de hidrocarburos que, aunque menos importantes que el
petróleo, son dignas de mención:
-
Gas natural:
Es una mezcla de hidrocarburos de entre 1 y 8
átomos de carbono. El metano, con un porcentaje de al menos el 80%
constituye casi toda la mezcla, y los demás hidrocarburos registran
porcentajes decrecientes. El gas natural, conducido por gaseoductos a
las ciudades, es el principal componente del gas ciudad. Con
frecuencia se separan previamente por licuefacción el propano y el
butano que se comercializan en bombonas a presión.
-
Carbón:
El carbón también es un combustible fósil
procedente de los restos vegetales de otras épocas geológicas. Si se
calienta un trozo de carbón en condiciones adecuadas (proceso que se
conoce como destilación seca del carbón), se descompone originando
tres productos principales:
-
Gas de
alumbrado (o gas de coquerías): Mezcla
constituida por aproximadamente un 50% de Hidrógeno (H2),
un 30 % de metano (CH4), un 8% de monóxido de carbono (CO)
y cantidades inferiores de otros hidrocarburos, Nitrógeno (N2)
y dióxido de carbono (CO2) entre otros. Se utiliza como
combustible. Hace muchos años era muy empleado en el gas ciudad pero
en la actualidad existe la tendencia de sustituirlo por gas natural
ya que es mucho más limpio.
-
Coque:
es el residuo sólido que deja el carbón.
Contiene toda la materia mineral del carbón pero principalmente
carbono libre. Esto hace que sea un combustible limpio (sin humos) y
por lo tanto muy apreciado.
-
Alquitrán:
líquido negro y viscoso de olor desagradable
formado por una mezcla de muchos hidrocarburos aromáticos.
Constituye la fuente principal de este tipo de compuestos
aromáticos, (ya que en el petróleo y el gas natural predominan los
hidrocarburos saturados). Sometido a destilación fraccionada, se
pueden separar benceno, tolueno, xileno, naftaleno, fenol,
antraceno, etc., también aceites pesados destinados a combustibles
en motores diésel y en calefacción, y como residuo una pez negruzca
que se utiliza para impermeabilizar edificios y pavimentar
carreteras.
El carbón más utilizado es la hulla (producto natural que contiene de
entre un 74 y un 90 % de Carbono). La hulla tiene la ventaja de que
produce un coque de gran calidad, pero sobre todo porque su alquitrán es
una fuente rica en los hidrocarburos aromáticos muy utilizados en la
industria química. En la siguiente tabla aparecen los datos de los
productos obtenidos en la destilación seca de la hulla (por cada 1000 Kg):
Destilación de la
hulla (por cada 1000 Kg)
|
Producto |
Cantidad |
Carbón de coque
Alquitrán
Benceno, tolueno, xilenos
Amoniaco
Gas de alumbrado |
750 Kg
30 – 35 Kg
7 – 12 Kg
1 – 3 Kg
300 – 500 m3 |
|